La Devolucion del Ser Humano
La Devolución del Ser Humano
"Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad; porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de écuadrúpedos y de reptiles." Romanos 1:20-23
EVOLUCION O DEVOLUCION
Cursaba el segundo año del doctorado en Neuro Teología Cristiana y era la última conferencia de la clase y el último día de reunión para el receso navideño. En el ambiente se respiraba una atmósfera de fiesta, pues los días festivos se aproximaban. El tema de la clase giraba sobre: “El ADN y el Código de la Vida”.
Mientras el profesor Dr. Colón nos abría el entendimiento hacia otras dimensiones del saber y se interconectaban, por sinapsis eléctricas y bio-eléctricas, insospechadas rutas del aprendizaje en nuestras neuronas cerebrales, me quedé perplejo y con cierta duda; pues no podía creer lo que, en aquellos momentos, al profesor oía hablar. Nos decía que un estudio, “El Genoma Humano” , reveló que compartimos el 50% de los genes con la mosca de la fruta. El 99% de nuestros genes tienen un homólogo en los ratones. En el chimpancé la homología es de casi el 99% también. Se me mudó el semblante cuando continuó diciendo que otro estudio con el orangután, había llegado a la conclusión de que el humano comparte con ellos el 97% del ADN. Algo así, como un manto de frustración e incredulidad invadió mi ser.
Desde niño siempre había oído decir a todo el mundo, especialmente en la iglesia, que yo era “un hijo de Dios”, hecho a su imagen y semejanza, “un hijo de un Rey”, que todo lo que le pidiera al Padre, Él me lo concedía; que Él me guardaba siempre, que un día estaría con Él en el Cielo, con palmas en las manos, jugando en su “play-yard” y tocando un arpa de oro. También había oído decir que pasearía por unas calles de oro, un mar de cristal también.
Por fin se dio por terminada la clase y mi mente no dejaba de repetir, como un disco rayado…“Compartimos el 99% del ADN con el Chimpancé, con el Orangután 97% y con las ratas sólo el 1% es la diferencia.
Como un “flash”, en mi mente se iluminó la escena de la entrada al “Infierno de Dante”, donde hay un letrero que dice: «Es por mí que se va a la ciudad del llanto, es por mí que se va al dolor eterno y al lugar donde sufre la raza condenada, yo fui creado por el poder divino, la suprema sabiduría y el primer amor y no hubo nada que existiera antes que yo, abandona la esperanza si entras aquí». Pero inmediatamente volví a la realidad. No... No estaba en el infierno de Dante, estaba en un salón de conferencias. Para mis adentros me decía… “¡Así que soy producto de la Evolución de Darwin y mi Padre que está en los cielos ya no era aquel que le podía llamar “Abba Padre”, sino que el estudio del “Genoma Humano” , el cual nos acaba de explicar el profesor, me confirma que en verdad tengo a un Chimpancé por “padre”.
Se me formó una congestión de tránsito de preguntas sin respuestas que a borbotones se agolpaban en mi mente. Las 100,000 millones de neuronas y las tres veces más ese número de células gliales en mi cerebro comenzaron a transmitir y a recibir mensajes eléctricos y bio-eléctricos, de forma tal, que se juntó correo con correo y me acordé de Jeremías el profeta cuando decía: “Correo se encontrará con correo, mensajero se encontrará con mensajero, para anunciar al rey de Babilonia que su ciudad es tomada por todas partes.” Por fin terminó la clase y recesaríamos hasta el próximo mes de enero.
Día de Despedida de Año
Miles de petardos, fuegos artificiales, “cheri- bombs”, cuartos de dinamita, tiros al aire, flautas y alaridos de gente eufóricas gritando, celebrando la venida del año nuevo mientras “yo” me encontraba enfrascado en las lecturas por la internet y en cuanta literatura encontraba tratando de ver si en verdad el “dichoso chimpancé era mi “padre” biológico, el ratón Mickey, mi hermano de sangre y, el no muy apuesto orangután mi familiar más cercano, como decía el estudio sobre el “Genoma Humano” y la Teoría de la Evolución de Darwin. Ya estaba por darme por vencido y aceptar la Teoría de la Evolución de Darwin, cuando me puse a revisar mis notas de los cursos que había tomado, cuando comencé a leer que el cerebro humano se compone de cien mil millones de neuronas y un número mayor de células "gliales", entre ellas las "astrocitos", cuya función principal es de barrera hematoencefálica la cual restringe qué sustancias pueden ingresar al cerebro. https://www.psicoactiva.com/blog/las-celulas-gliales-tipos-funciones/
Después de unos días de meditación y búsqueda, me vino la inspiración del por qué el animal de Darwin, teniendo la misma molécula de ADN que el humano, no nos emparentamos tanto, como dicen los científicos y los que creen en la Evolución.
Primero, cuando Dios creó a los animales dijo: "Produzca la tierra animales..." Mientras que cuando creó al hombre no dijo: "Produzca la tierra al hombre", sino que dijo: "Hagamos al hombre a nuestra imagen y nuestra semejanza." - Segundo, Dios le añadió a ese "Diseño Inteligente", el ADN de Adán, un código para que pudiese comunicarse con El en todo tiempo, un soporte "Neurofisiológico", pero la desobediencia hizo que se desconectara la comunicación y ese soporte neurofisiologico quedara entenebrecido sin la luź del conocimiento del Creador, como dice el texto más arriba: "Habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles."
El profeta Isaías en el Capítulo 8:20-23, profetizó sobre la condicion del pueblo sin Dios y sin esperanza y dijo: "Cuando angustiados y hambrientos, vaguen por la tierra. Levantando los ojos al cielo, maldecirán a su rey y a su Dios y, clavando la mirada en la tierra, solo verán aflicción, tinieblas y espantosa penumbra; ¡serán arrojados a una oscuridad total!
Pero en el próximo Capítulo 9:1,2, profetiza sobre la Luz que vendría para sacar al hombre y a la mujer de las tinieblas en las que se encontraban y dijo: "Mas no habrá siempre oscuridad para la que está ahora en angustia, tal como la aflicción que le vino en el tiempo que livianamente tocaron la primera vez a la tierra de Zabulón y a la tierra de Neftalí; pues al fin llenará de gloria el camino del mar, de aquel lado del Jordán, en Galilea de los gentiles. El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos."
Dios hizo al hombre perfecto, a su imagen y semejanza, con un soporte Neurofisiológico capaz de comunicarse con su Creador y cuidar su creación. Pero la desobediencia lo dejó en tinieblas y comenzó a Devolucionar, en vez de ser sabios, con todo el conocimiento del misterio de la creación, se hicieron necios y su mente fue entenebrecida. Las cien mil millones de neuronas cerebrales se apagaron y en vez de andar en la luz se quedaron en tinieblas, con el soporte Neurofisiológico semejante al animal de Darwing.
Dios, la Luz Verdadera, envió a su Hijo Jesús, la Luz del mundo para iluminar el camino del hombre sumido en tinieblas, y actuando desde el inconsciente y los impulsos como el animal de Darwin.
https://christianismoyfisicacuantica.blogspot.com/2023/02/analogy-between-gods-true-light-dual.html
Samuel Padilla Rosa, PhD
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